Reducir el impacto del buceo en los ecosistemas marinos

La costa mediterránea española cuenta con algunos de los paisajes marinos más atractivos del Mediterráneo y, por lo tanto, el buceo se ha convertido en una importante actividad turística. La importancia de este deporte debe ser compatible con la conservación de las especies que lo hacen atractivo (algunas de las cuales son endémicas y/o en peligro de extinción), siendo esencial promover la sostenibilidad en la práctica del buceo.

¿Cómo?

Para promover la sostenibilidad en las actividades de buceo hemos llevado a cabo diferentes proyectos con un objetivo común: minimizar los impactos provocados por el buceo sobre los ecosistemas marinos.

Estos proyectos se centran en tres actividades principales:

1. Realización de cursos formativos para guías y profesionales del buceo.

Estos cursos se centran principalmente en el papel que debe tener el guía (antes, durante y después de la inmersión), qué se debería explicar en un ecobriefing completo (la explicación previa a la inmersión), biología marina, impactos que provoca el buceo, etc. Planteamos este tipo de cursos como una herramienta para los profesionales del buceo, con el objetivo de ayudarles a promover una práctica de buceo más respetuosa.

En 2018 realizamos 13 cursos de este tipo en diferentes localizaciones de la Costa Brava (Cataluña), llegando a más de 200 guías e instructores de buceo.

Los cursos se realizaron para la Asociación de Centros de Buceo de la Costa Brava (Costa Brava Sub) con la financiación del Fondo Europeo Marítimo y Pesquero (EMFF) de la Unión Europea a través del GALP Costa Brava y del Departament d’Agricultura, Ramaderia, Pesca i Alimentació.

2. Crear recursos informativos y una etiqueta ecológica para los centros de buceo sostenibles.

Hemos desarrollado manuales de buenas prácticas para actividades de buceo y también una etiqueta ecológica para certificar los centros de buceo que promueven una actividad sostenible.

Wildsea Divers” es un ejemplo de este tipo de proyectos, en el que se crearon tanto recursos informativos como una etiqueta ecológica. Se realizó en dos áreas marinas protegidas (AMP) de la costa mediterránea española: Illes Medes (Cataluña) e Illes del Toro y Malgrats (Baleares), alcanzando a un total de 18 centros de buceo. Este proyecto contó con el apoyo de la “Fundación Biodiversidad (Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente)” y de la “Obra Social La Caixa”.

3. Estudiar el impacto de las actividades de buceo monitoreando el comportamiento del buceador/a o su uso del espacio durante las inmersiones.

SUBMON ha desarrollado este tipo de estudios en la AMP más visitada de la costa catalana: las Illes Medes. Estos estudios han contado con la financiación del Parc Natural del Montgrí, les Illes Medes i el Baix Ter y del Departament d’Agricultura, Ramaderia, Pesca, Alimentació i Medi Natural (Generalitat de Catalunya).