Estudio y evaluación veterinaria de lesiones por anzuelo en tortugas capturadas por palangre.
Un estudio de investigación financiado por la NOAA (National Oceanographic and Atmospheric Administration) para la conservación de las tortugas marinas, ha aunado la colaboración de varias entidades científicas internacionales y gubernamentales, como Alnitak, impulsora del proyecto, SUBMON, ANSE y la Secretaría General del Mar. El estudio permitirá conocer y evaluar las lesiones provocadas por diferentes anzuelos testados en la pesca de palangre, así como realizar el seguimiento, a través del marcaje con satélites, de una veintena de tortugas durante más de un año. La zona de trabajo se sitúa en el LIC (Lugar de Interés Comunitario) del Medio Marino de Murcia.
Algunos estudios clínicos revelan que las lesiones provocadas por anzuelos en la captura de tortugas marinas pueden ocasionar daños posteriores graves, llegando incluso a provocar la muerte del individuo. Por ese motivo los estudios que ayudan a reducir la mortalidad post-captura se consideran igual de importantes que aquellos que ayudan a mitigar las capturas accidentales.
SUBMON y su equipo de colaboradores ha participado este año, conjuntamente con biólogos de Alnitak y investigadores de la NOAA, impulsores del proyecto, en el estudio de las lesiones post-captura de tortugas capturadas accidentalmente en un ensayo pesquero que compara el uso de anzuelos circulares y anzuelos “J”, a bordo del Galeras, un pesquero perteneciente a Reservas Marinas de España y que gestiona el Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación y la Comunidad de Murcia.
Además de la evaluación de lesiones se ha llevado a cabo la extracción de sangre a las tortugas capturadas durante la pesca, para el posterior análisis y estudio comparativo de los valores sanguíneos, como el nivel de corticosterona o el ácido láctico, que identifican el estrés sufrido por el animal. Para poder obtener un valor de control en tortugas que no han sufrido estrés se capturaran además otras 10 tortugas salvajes, a las que también se hará la extracción de sangre. Las 20 tortugas seran liberadas con un transmisor que mandará una señal que podrá ser interpretada vía satélite y seguida a través del sistema ARGOS durante más de un año por el equipo de la NOAA.
En el estudio han participado tres embarcaciones de época, el “Toftevaag” y “Thomas Mc Donagh”, de la organización Alnitak, y el “Else” de la Asociación Naturalista del Sureste (ANSE), que han navegado paralelamente al pesquero dando soporte en la captura de tortugas salvajes y en el transporte de los científicos hasta la zona de pesca.