Captura accidental de mamíferos marinos: de una escala global a una local
Se conoce como captura accidental o bycatch el hecho de capturar especies no deseadas en una operación pesquera, es decir todas aquellas especies que no son el objetivo de la pesquería. Hay quien puede argumentar que la captura accidental es una consecuencia aceptable de poder suministrar diariamente al mundo especies de pescado y marisco de estado salvaje. Frecuentemente, los valores asociados de mortalidad son tan altos que amenazan poblaciones y especies. Los datos indican que, anualmente, un mínimo de 7,3 millones de toneladas de vida marina son capturadas accidentalmente.
El problema se agrava si el bycatch se da con especies protegidas. Normalmente se utiliza el término bycatch para referirnos a aquellas capturas accidentales de especies de megafauna marina (mamíferos marinos, tortugas, aves marinas y tiburones y otras especies de peces de gran tamaño).
Debido a esta captura accidental, especies como el delfín del Yangtzé se ha declarado extinto y la vaquita o marsopa de California lo estará probablemente en esta década. Dos ejemplos de una actividad pesquera que, a pesar de no buscar su muerte de forma voluntaria, la ha comportado.
Las capturas accidentales no buscan perjudicar ni de forma directa ni indirecta a estas especies y deben entenderse como hechos que se producen de forma fortuita. No obstante, hay que tener presente que el impacto que se produce puede ser muy alto. A nivel mundial, se estima que 300.000 delfines mueren a los artes de pesca cada año.
En cuanto a mamíferos marinos, las capturas accidentales se dan principalmente por dos motivos. Uno, porque quedan atrapados a los artes de pesca por no haberlos detectado. Dos, porque quedan atrapados cuando voluntariamente han ido a aprovechar un recurso alimentario que les daba el arte de pesca. Para tratar de minimizar la captura accidental, en el primer caso se debe intentar que los delfines vean y reconozcan el arte para poderlo evitar. En el segundo, hay que evitar que los delfines se acerquen a alimentarse al arte y en caso que no se pueda evitar, ver la manera de que no queden atrapados. Tres son los modos como abordar estas capturas:
- Cambios en las operaciones y prácticas pesqueras
- Modificaciones y mejoras en los aparejos de pesca
- Restricciones y regulaciones espaciales y temporales para evitar la interacción





Cataluña no está exenta de esta problemática mundial. Aunque con órdenes de magnitud bastante diferentes, también se da interacción entre delfines y actividad pesquera. Desde SUBMON, y mediante el proyecto #PescantAmbDofins financiado por GALP con fondos FEMP, hemos creado un espacio de participación para que, junto con los pescadores y la administración, se puedan encontrar soluciones o alternativas viables para minimizar al máximo las posibles capturas de especies protegidas que puedan darse nuestras costas. Esta última semana, con una relevante presencia de los pescadores de las cofradías de Roses y Llançà y representantes de la Sección de Control i Asuntos Marítimos del Departament Agricultura, Ramaderia, Pesca y Alimentación y del Servicio de Fauna y Flora del Departamento de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat de Catalunya, ha empezado a poner manos a la obra para encontrar solución conjunta y el establecimiento de un protocolo que sea fácil a seguir por parte de los pescadores. Muy agradecidos por la predisposición de cada parte. Avanzamos y seguiremos informando.